Estamos en un momento de toma de decisiones, de decisiones firmes, estables, y de largo plazo. Ya no hay confianza en nada ni nadie. Tanto los lideres espirituales, como los del gobierno, los de la banca y la sociedad en general están en un completo caos. Entonces, es el momento para que Dios intervenga, ya que hemos confiado en todos los sistemas del mundo, menos en El. El Cristianismo, ha dejado infiltrar el pensamiento griego, las leyes romanas y el sistema monetario babilónico a La Iglesia. Debe haber una REFORMA radical en el corazón de la humanidad, comenzando por los hijos de Dios para que el Reino de Dios comience a entrar en las naciones.
Cuando no tenemos nada es cuando Dios se mueve. En Marcos 6 el Señor Jesús hizo un milagro con el almuerzo de un niño, alimentando a por lo menos 20.000 personas contando mujeres y niños. Miró hacia arriba y lo bendijo, no miró hacia abajo para analizar el sistema de multiplicación con ecuaciones, etc.
“Suelta” lo que tienes en tu mano y Dios lo multiplicará cien veces y, hasta mil veces más!
Cada vez que usted sienta temor diga: “He levantado mis circunstancias a Dios, y El las ha cambiado. He bajado del cielo la multiplicación de lo que tengo, para obtener el milagro que el mundo dice que es imposible, porque para Dios TODO es posible”.
Hasta pronto,
Sylvia
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